El Grupo de Estudio y Seguimiento de Volcanes Activos (GESVA), con la colaboración de investigadores de la Universidad Nacional de La Plata, Instituto CEDIAC, de la Universidad Nacional de Cuyo y universidades extranjeras de España e Italia, estuvieron realizando estudios y trabajos de monitoreo del volcán Copahue. Este volcán (37º45’S – 71º10.2’O, 2977 m s.n.m.) está situado en el límite entre Argentina y Chile.

El sistema volcánico del Copahue ha presentado una variación en su comportamiento en los últimos meses. La actividad sísmica sufrió un cambio a partir del terremoto de Chile del 27/2/2010 (Mw 8.8), evidenciado por un aumento de actividad en el interior de la caldera. La principal modificación se observó a partir de diciembre de 2011 cuando, en coincidencia con una importante actividad sísmica se registró un aumento de las emisiones gaseosas en la laguna cratérica. Estudios de Inteferometría Diferencial de Radar (DInSAR)  indicaron una deflación durante el periodo 2004-2007 e inflación a partir de noviembre-diciembre 2011. En marzo del presente año (2012) se determinó un aumento significativo de especies químicas, de la acidez y de la temperatura de las aguas.

 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

 

 

A partir del 09/07/2012 aumenta la actividad sísmica y se registra un marcado descenso del nivel de agua de la laguna cratérica, con un intenso burbujeo (borbotones de 1-2 m de altura) y desprendiendo importantes plumas verticales de vapor y gas que alcanzan los 200-300 m de altura desde la cumbre. Un evento extraordinario (17/07/2012) fue fotografiado por un guía local donde se observó una manifestación freática de pequeña escala, arrojando agua y lodo del fondo del lago, elevándose aproximadamente hasta más de 10 m de altura.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

(Fotos gentileza de Nicolás Sieburger, 17/7/12)

El 19/07/2012 por la noche ocurrió una explosión freatomagmática? con emisión de material piroclástico, generando una pequeña pluma de aproximadamente 18 km, en dirección E-SE. Escasos bloques, de hasta 20 cm de diámetro, fueron arrojados alrededor del cráter junto a material tamaño arena y lapilli, llegando al extremo de la pluma en Cajón Chico partículas finas mezcladas con la lluvia. Los fragmentos vítreos presentan composición similar a los arrojados por el volcán en el año 2000.

La actividad fumarólica y los burbujeos intensos, cíclicos, continúan en el cráter hasta la actualidad La superficie del lago por momentos permanece completamente oculta por las nubes de gas y vapor, que producen un intenso olor a azufre y rápida irritación de vías respiratorias y ojos.

 

Caselli, A.T., Agusto, M. R., Vélez M. L., Bengoa, C.L., Forte, P. B. Grupo de Estudio y Seguimiento de Volcanes Activos (GESVA), Instituto de Estudios Andinos “D. Pablo Groeber” (UBA-CONICET),  FCEyN – UBA.

Badi, G. Departamento de Sismología e I. M., Facultad de Ciencias Astronómicas y Geofísicas, Universidad Nacional de La Plata

Daga, R., Laboratorio Análisis por Activación Neutrónica (CAB-CNEA) – CONICET y Cotaro,C. y Ayala, C. Grupo de Caracterización de materiales (CAB-CNEA)

Euillades, P., Euillades, L., Blanco, M., Balbarani, S., Instituto CEDIAC – Facultad de Ingeniería  Universidad Nacional de Cuyo

Araujo, M., Instituto Nacional de Prevención Sísmica

Para mayores detalles se remite a los interesados a Dr. Alberto T. Caselli (atcaselli@gmail.com).