En una reciente publicación de la acreditada revista Solid Earth, una revista de acceso abierto e interactivo de la European Earth Sciences Union, investigadores de nuestro instituto con la colaboración del prestigioso centro de geocronología de la University of Geneve y de la Universidad Autónoma de México, han dado a conocer una nueva serie de datos geocronológicos que confirman un desfasaje de 4 a 5 millones de años en el límite Jurásico-Cretácico  aceptado por la International Union of Geological Sciences.

La edad numérica del límite J-K había sido ya cuestionada por trabajos previos realizados por investigadores de nuestro Instituto en la localidad de las Loicas, en la cuenca neuquina, donde las primeras dataciones U-Pb en circones por los métodos SHRIMP y CA-TIMS, mostraban una discrepancia con los valores establecidos en la Geological Time Table de la International Commission on Stratigraphy de la IUGS.

La edad numérica de este límite era controvertida y difícil de determinar en la región del Tethys debido a la falta de rocas volcánicas intercaladas en las secciones europeas estudiadas. En este trabajo se presentan datos geocronológicos U-Pb de alta precisión realizados en circones procedentes de niveles de tobas mediante técnicas de abrasión química y dilución isotópica (CA-ID-TIMS, chemical abrasion, isotope dilution, thermal ionization mass spectrometry) realizadas en los laboratorios de geocronología de la Universidad de Geneve.

Las muestras analizadas provienen de muestras de tobas de caída pliniana intercaladas con las pelitas negras de la Formación Vaca Muerta, tanto por encima como por debajo del límite bioestratigráfico J-K establecido en la sección de Las Loicas de la cuenca neuquina. Los resultados obtenidos se cotejaron con muestras de rocas volcánicas procedentes del límite Jurásico-Cretácico en una sección de la Sierra Madre Oriental de México. La clásica sección de Mazatepec donde este límite se había establecido mediante asociaciones de calpionélidos y nanoplancton calcáreo, presentaba marcadores fosilíferos primarios y secundarios para el límite, así como horizontes de ceniza volcánica intercalados que permitieron obtener nuevas dataciones radioisotópicas en el Tithoniano tardío y el Berriasiano temprano.

También se analizó la base de la Formación Vaca Muerta en el clásico perfil de la Yesera al norte de Chs Malal en la provincia de Neuquén. De esta localidad se presentan las primeras determinaciones de edad del Tithoniano temprano que permiten proponer tentativamente una duración mínima para este piso de casi 7 millones de años.

Sobre la base de las nuevas edades radioisotópicas del Tithoniano tardío hasta el Berriasiano temprano, que indican un límite J-K entre 140,7 y 140,9 Ma. Estas nuevas edades permiten verificar una diferencia superior a cuatro millones de años con el límite actualmente aceptado por la International Commission on Stratigraphy. Es de destacar que la diferencia entre los valores obtenidos en la Sierra Madre Oriental y la cuenca Neuquina con controles bioestratigráficos diferentes, los que no tienen la misma precisión, es menor a 200.000 años, a pesar de estar ubicados a más de 8000 kilómetros de distancia. Las nuevas dataciones indican que el límite debe ser mucho más joven que el de 145 Ma aceptado actualmente.

Para mayores detalles se remite a los interesados al trabajo original publicado.

Lena, L., López-Martínez, R., Lescano, M., Aguirre-Urrreta, B., Concheyro, A., Vennari, V., Naipauer, M., Samankassou, E., Pimentel, M., Ramos, V.A. y Schaltegger, U. 2018. High-precision U-Pb ages in the Early Tithonian to Early Berriasian and implications for the numerical age of the Jurassic/Cretaceous boundary, Solid Earth (en prensa).

Journal webpage: https://www.solid-earth.net