Con el advenimiento de la democracia se inician en la Universidad de Buenos Aires en marzo de 1984 los cursos de Geotectónica, destinados a enseñar los procesos formadores de montañas y cuencas asociados a la Tectónica de Placas, dictados por el Dr. Victor A. Ramos y el Ing. Daniel Valencio. El inicio del dictado de estos cursos, también marca el comienzo de las actividades de un grupo de investigación abocado en forma específica al estudio de la evolución tectónica de la Cordillera de los Andes. Se puede decir que esta fecha marca el establecimiento formal de las actividades de investigación tectónica en los Andes, primero a través del Área de Geotectónica, para poco después consolidarse en el Laboratorio de Tectónica Andina. A través de casi de 25 años de investigación y enseñanza este laboratorio se ha convertido en un centro de referencia en los estudios andinos dentro del continente sudamericano. La organización de numerosos Simposios sobre Evolución Tectónica de los Andes, en diversos congresos geológicos argentinos y chilenos, así como a través la activa participación en congresos latinoamericanos e iberoamericanos, permitió dar a conocer las actividades y resultados obtenidos por el Laboratorio de Tectónica Andina. Esta actividad acompañada por una fuerte difusión y publicación de los resultados en revistas internacionales indexadas llevó en pocos años a este Laboratorio a convertirse en uno de los centros mundiales más conocidos con respecto a los estudios tectónicos de los Andes.
La naturaleza interdisciplinaria de estos estudios motivó ya en los años iniciales una fuerte colaboración con los investigadores del Laboratorio de Bioestratigrafía de Alta Resolución (LBAR), los que a través de prolijos y detallados estudios aportaron el conocimiento de las edades geológicas de las secuencias estratigráficas estudiadas y solucionaron distintos problemas estratigráficos de vital importancia para resolver los problemas tectónicos.
Como parte de la necesidad de establecer un punto de partida para las condiciones iniciales anteriores a la deformación andina se ha contado con una activa colaboración del Grupo de Investigaciones Paleobiológicas en Ambientes Continentales (GIPAC). Este grupo ha trabajado desde hace tiempo y activamente en el análisis del origen y evolución del relleno de los sistemas de rift triásicos, particularmente enfocándose al estudio de sus biotas, paleoambientes y correlaciones paleogeográficas. Es importante destacar, y como antes se mencionara, que estos sistemas han tenido un importante control en la deformación andina posterior.
En los últimos años la creación de un Laboratorio de Modelado Geológico (LaMoGe) ha permitido simular a partir de modelos físicos-análogos los procesos de deformación más comunes que ocurren en la cadena andina. De esta manera se ponen a prueba algunos conceptos teóricos e hipótesis de trabajo. Asimismo en este laboratorio se está trabajando con modelado numérico cinemático y mecánico de punta tanto en 2D como en 3D y se están desarrollando herramientas informáticas (software) para la construcción de secciones estructurales y sus reconstrucciones palinspásticas al estado no deformado.
Estos estudios se han complementado en los últimos tiempos con la necesidad de evaluar potencialmente el riesgo volcánico en regiones activas de los Andes, a través de la asociación con el Grupo de Estudio y Seguimiento de Volcanes Activos (GESVA), que agrupa a investigadores que analizan el volcanismo de regiones activas en los Andes. Este grupo ha establecido las normas a seguir ante crisis volcánicas de amplio uso en diferentes poblaciones e instituciones de nuestro país.
El Grupo de Investigaciones Paleobiológicas en Ambientes Continentales tiene y ha tenido una cooperación muy estrecha con grupos de investigación de otras partes del mundo, Entre ellos se incluyen la Universidad Federal de Rio Grande do Sul (Brasil), la Universidad de la República (Uruguay), la University of Michigan (USA), el Geological Survey de Namibia, y el South African Museum y la University of Witwatersrand, ambas en Sudáfrica.
El fuerte interés de la comunidad científica internacional en aspectos relacionados con el cambio climático y la existencia en nuestro país de excelentes archivos de reconstrucción paleoclimática fueron la principal motivación de la creación en el 2007 del Laboratorio de Sondeos de Ambientes Continentales y Marinos (SACMa). El SACMa incluye un grupo de investigadores que desarrollan estudios de reconstrucción paleoambiental y paleoclimática a partir de bioindicadores biológicos de secuencias sedimentarias del Cuaternario en diversas áreas de Argentina, pero en particular en áreas cordilleranas de la Patagonia septentrional y meridional. Los resultados de estas investigaciones permiten analizar la evolución paleoambiental cuaternaria de la Patagonia dentro de un contexto de evolución climática regional, hemisférica y global, permitiendo incursionar en las principales forzantes de dicho cambio.
El grupo de carbonatos y cicloestratigrafía está enfocado al estudio de plataformas y rampas con afloramientos espectaculares, que han permitido reconocer a través de análisis estratigráficos detallados, microfaciales, diagenéticos y secuenciales, la evolución paleoambiental de las mismas, además de aportar precisiones bioestratigráficas. El estudio detallado permitió, por otra parte, alcanzar un notable conocimiento en la ciclicidad y en la periodicidad de la misma, dentro de la banda de frecuencias de los ciclos de Milankovicht. Estos estudios son relevantes para su comparación con aquellos ciclostratigráficos del Hemisferio Norte.
La actividad académica realizada estuvo también fuertemente vinculada a la exploración minera y petrolera de los Andes, a través del sostén a nuestras investigaciones tectónicas y tectonosedimentarias realizadas por y para empresas mediante apoyos logísticos y financieros, principalmente para la formación de recursos humanos en estos temas.
Un fuerte impulso en estas investigaciones fueron los convenios realizados entre la Universidad de Buenos Aires a través del Laboratorio de Tectónica Andina y el Servicio Geológico Nacional, hoy SEGEMAR (Servicio Geológico Minero Argentino), para realizar los levantamientos geológicos de remotas áreas de la Alta Cordillera de Los Andes de San Juan y Mendoza como asimismo para estudios del riesgo geológico en dichas áreas.
Una constante preocupación de estos grupos de investigación ha sido la formación de recursos humanos, a través de pasantías de campo y gabinete, dirección de trabajos finales de licenciatura con más de 150 trabajos dirigidos y 50 tesis doctorales finalizadas, dirección de becarios estudiantes, de doctorado y posdoctorales, y de investigadores del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas. El detalle de los mismos se observar en los diferentes grupos de investigación. Esta formación de recursos humanos no sólo se evidencia por una importante cantidad de investigadores que trabajan en esta universidad y en otras instituciones del país y del extranjero, sino en una gran cantidad de profesionales con excelente formación académica que se desempeñan actualmente en la industria en nuestro país y en diversas partes del mundo.
Esta política académica estuvo acompañada siempre de una fuerte interacción con otros grupos de investigación internacionales, líderes a nivel mundial en estos estudios, a través de la colaboración, complementación y formación de recursos humanos en el país y en el extranjero. Fruto de esta colaboración es el fuerte intercambio que existió entre los investigadores del laboratorio con el Andes Project de la Cornell University, con los Grupos de Estudios Andinos de las universidades Libre de Berlín (Freie Universität), la de Potsdam, la de Kiel y la Tecnológica de Berlín en Alemania, así como con otras universidades de Estados Unidos tales como las de Georgia en Atlanta, Texas en Austin, Arizona, y de otros países como Canadá, España, Inglaterra y Francia, con grupos activos de exploración en Los Andes. Una mención especial es la larga actividad de investigación conjunta con las Universidades de Oviedo y Barcelona de España, a través del programa Transcuyo, Paleoandes y otros proyectos financiados por instituciones europeas. El Instituto Jaume Almera de Barcelona ha venido realizando también importantes tareas de investigación conjunta.
En lo que respecta al estudio y seguimiento de volcanes activos, recientemente se comenzaron investigaciones conjuntas con grupos de investigación del Instituto Andaluz de Geofísica de la Universidad de Granada (España), de la Universidad Complutense de Madrid (España), del Observatorio Vesubiano (Italia) y la Universidad de Firenze (Italia).
El Laboratorio de Bioestratigrafía de Alta Resolución ha venido trabajando en colaboración con numerosos investigadores extranjeros, entre los que cabe mencionar al Laboratorio de Micropaleontología de la Florida State University y el Laboratorio Antarctic Facilities (FSU-USA), ambos conducidos por el Prof. Dr. Sherwood Wise; el Museum of Geology de la South Dakota School of Mines and Technology (SDSMT-USA) dentro del programa de investigaciones de eventos de extinción del Cretácico Superior dirigido por el Prof. Dr. James Martin. Actualmente se encuentra cooperando activamente con el Laboratorio de Micropaleontología de la Universidad de Río Grande del Vale dos Sinos, UNISINOS, a cargo del Prof. Dr. Gerson Fauth en la transición del Cretácico/ Paleógeno y en el análisis y comparación de cuencas sedimentarias cretácicas brasileñas, argentinas y del Atlántico Sur.
Asimismo se prevé seguir colaborando con el Prof. Peter F. Rawson del University College of London (UCL-UK), con quienes ya se han realizados numerosos trabajos de investigación en amonoideos del Cretácico inferior de la cuenca Neuquina.
Estos laboratorios y grupos de investigación a través de los años habían realizado diversos proyectos de investigación conjunta de manera informal. A fines del año 2006 unos veinte investigadores de la Universidad de Buenos Aires y del CONICET decidieron reunirse para formar una unidad ejecutora del CONICET como Instituto de Estudios Andinos Don Pablo Groeber, y ser a su vez reconocidos por la Universidad de Buenos Aires. El Instituto fue finalmente creado el 13 de setiembre de 2010 por el directorio del CONICET (Resolución 2493/2010), que previamente contó con el aval del Rector y posteriormente confirmado por el Consejo Superior de la Universidad de Buenos Aires (Resolución CS 1501/2010). De esa forma el IDEAN se ha convertido en un instituto de doble dependencia UBA/CONICET.